NADIE QUIERE A LOS HERIDOS

- ¿Estás solo?

- Sí, estoy solo

Un hombre mira un cervatillo echado en la arena.

Un cervatillo de piernas atadas es mirado

por un hombre es postura sacrificial.

Un hombre disfrazado de Mahatma sabe

que ese peso oculta las ataduras.

La imagen de dos, hombre y cervatillo

a metro y medio de distancia sentados en la arena.

Él con las piernas cruzadas.

El otro con las patas atadas ocultas por el peso de su cuerpo.

El depredador sonríe.  El cervatillo tiembla.

Los dos no saben.

DESTILAR     

una corriente de la boca a los senos

acepta lo posible

el cielo es el tránsito

la calma lo que antes era

desasosiego

separo lo volátil de lo que no lo es

y condenso este amor que derrama

cada una de sus letras

LAS LILAS DEL AGUA , 2019

Water Lilies - 1917 Claude Monet

en un concierto extraño

las flores invertidas de Monet

tiemblan en las que llevo.

un fastidio ajeno permea el reflejo

de lo que veo, lo que creo, lo que hago.

¿la sangre florece?

lo que fue celebración de pétalos

son telas sobre lo viscoso

y los juncos, lanzas que apuntan

a un espacio desolado de ocres.

ha tiempo las aguas de las lilas hablaron de amor

CONTAR PISADAS

con un rosado

dice lo que ha tiempo sabe

como si no supiera

con su cabeza de organza

pegada al gris

no vuelve a subir lo andado

y un vidrio le hace la pantomima

la niña anterior

grazna con  los ojos ávidos

y la retama de los balcones

la transparenta

EPIFANÍA

por andar el pasado

el viento se ha llevado la flor de hoy

para unos dorada para otros transparente

es más cómodo así

el polvillo todo lo alcanza

hasta tu mirada que cae

y aparta la sombra

ella gira sus tacones

deja la espalda al sacrificio

y quiere más que nunca

el abrigo que quema

abrir los ojos la vuelve extranjera

CAZAR ESCARABAJOS

en lo vertical de los ojos abiertos

hay cables indiferentes donde corre la vida

una pizarra a la intemperie con aviones de tiza

una flor amarilla pintada en el asfalto

donde amanece temprano y anochece tarde

quién podría viajar en una sordina

cazar escarabajos

ganar distancias

revivir mi ciudad de su muerte anunciada

torcerle el cuello al día

Belkys Arredondo Olivo nació en Caracas, Venezuela. Realizó estudios en la Escuela de Artes Plásticas Cristóbal Rojas (1970), en la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela (1990) y de Postgrado en Literatura Venezolana de la misma universidad (1999).  Ha publicado Sagita (1998), Abecedario roto (1999). De un grano de arena saldrá un pájaro (2001), Cóncavo (2005) A ras del vidrio (2006) con el que obtuvo el Premio Latinoamericano José Rafael Pocaterra, El llamado de los grillos (2010), Antología mínima, Biombos de humo (2012) y Cayenas (2016). Ha coordinado talleres de poesía en el Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos, 2008. (Celarg). En noviembre de 2012 el Círculo de Escritores de Venezuela le otorga la Medalla internacional de poesía Vicente Gerbasi como reconocimiento a su obra. En dos oportunidades recibe el PREMIO MEJOR PUBLICACIÓN, por la Cámara Nacional de Libro venezolana en el año 2000 y en el 2010. Publicada en diversas antologías entre las cuales nombramos Taller de Poesía para uso de Talleristas (1998), Voces Nuevas (1999), Las Voces de la Hidra. Antología de la poesía venezolana de los años 90. (2002). Antología poética del Círculo de Escritores de Venezuela (2005) Blanco Móvil, ejemplar dedicado a la poesía venezolana (México, 2006), La poesía venezolana senderos y encrucijadas, María Antonieta Flores, Revista La Otra, (México, 2009), y Cantos de Fortaleza, antología de poetas venezolanas (2016),  entre otros.