MI LIBRO PREFERIDO ES PARA USTED
Los dinosaurios viven
en las esquinas de las bodegas,
no hacen daño.
Los dinosaurios comen migas de pan
y gotas de rocío,
por eso caminan por los techos.
Los dinosaurios de panza naranja,
comen jocotes maduros,
y eructan como las vacas.
Tengo un dinosaurio pequeño para usted.
Es suave como una bola de hule,
y come arroz crudo con miel.
No me atrevo a dárselo,
no quiero que se asuste.
Le regalaré antes
mi único libro sobre dinosaurios.
UNA IGUANA SIN RÍO
En el aula,
un pupitre está vacío.
La maestra dice que usted se fue a un pueblo
cerca del mar.
Me dijo también
que uno no se da cuenta
cuando los arco iris desaparecen,
y sin embargo,
a uno le hace bien pensar en su luz.
Desde la ventana
mis ojos viajan por encima de los cerros.
Añoro los recreos con usted.
Me queda el libro que leímos juntos.
Mi corazón está triste
como una iguana sin río.
LE GUSTA EL AGUA DE PIPA Y EL ARROZ CON CAMARONES
Abuela Andrea ama el mar,
observa sin prisa los cangrejos.
Se mira joven en el espejo de la playa
y sueña con sones cubanos, cumbias y boleros.
Entonces,
camina bailando
al ritmo de las olas
que de cuando en cuando llegan hasta sus caderas.
Pantalones cortos rojos,
camiseta blanca,
y su rosario de luces.
En su viaje por los litorales,
silba, canta, conversa son sus ancestros,
y le queda eterno el día
para rezar.
Ella conoce el sonido de Dios,
por eso busca el mar.
AMORES PULGOSOS
Las pulgas aman la panza de los perros,
las he visto brincar y dar vueltas en el aire.
A veces toman un pelo y hacen suiza.
Las pulgas tienen resortes en los talones.
Cuando mi perro se rasca,
las pulgas se esconden en sus axilas.
Quietas, se asoman con sus grandes ojos de lámpara.
Cuando todo vuelve a la calma,
se lanzan hasta el tobogán del ombligo.
Cuando los perros duermen panza arriba,
las pulgas aprovechan y juegan brinca brinca,
se despeinan y ríen,
Las pulgas aman la panza de los perros.
AMOR COMPLETO COMO UN ESQUELETO
Los peces pasan por debajo de la luz.
La hojas blancas están solas.
Yo estallo en dibujos, en poemas,
en palabras boscosas y alegrías de piñata.
Te amo desde hace siglos,
y esto no cambiará nunca,
aunque me convierta en un adulto,
y me preocupe por los impuestos
y por las noticias.
Minor Arias Uva (Pérez Zeledón, Costa Rica, 1971). Doctor en Educación. Escritor, poeta, Profesor Universitario, Promotor Cultural. Entre sus libros publicados destacan Canción de lunas para un ermitaño, Universidad Regiomontana, Monterrey, México. Canción de lunas para un Duende. ECR. Publica sus textos en diversas revistas latinoamericanas. Es colaborador y amigo de las ediciones surrealistas de Art Edition, San José, Costa Rica.