ANNIVERSARIO DEI MORTI
Tu che con braccia severe
mi allontanavi
e mi atterrivi con storie di fantasmi
ora t’affacci timida da sopra il muro
per timore di essere scacciata.
Nevica
e i tuoi piedi freddi in una
vaga foschia lasciano impronte.
Inconsolata mi tendi
la mano, ché la speranza è anche dei morti.
Così madre bambina percorri i viali
tu che dominavi, incerta,
finalmente un sorriso
sulla chiusa falce delle labbra.
Ma nevica e la giornata
volge alla sua fine – nemmeno questa volta
apportando il perdono
o l’oblio.
ANIVERSARIO DE LOS DIFUNTOS
Tú que con brazos severos
me alejabas
y me aterrorizabas con historias de fantasmas
ahora te asomas tímida por encima del muro
por miedo de que te echen.
Nieva
y tus pies fríos en una
vaga calima dejan huellas.
Desconsolada me tiendes
la mano, pues la esperanza es también de los muertos.
Así madre niña recorres los paseos
tú que dominabas, incierta,
por fin una sonrisa
en la cerrada guadaña de los labios.
Pero nieva y el día
está acabando –ni siquiera esta vez
trayendo el perdón
o el olvido.
I MORTI UCCIDILI DI NUOVO
strappali come male erbe
da dove stanno sospesi
e ci minacciano –
nel tempo sospesi come
vessilli spezzati
i morti ridenti
i morti dai denti lucenti
ci incalzano a nostra volta a morire
così i morti seppelliscono i morti.
Ma tu amore perdonali
e perdonando infilza il coltello
nelle loro gole di vento
strappa loro un grido
come le sirene notturne strappano gridi alla nebbia
e poi strappati gli occhi
guarda finalmente senz’occhi.
A LOS MUERTOS, MÁTALOS DE NUEVO
arráncalos como las malas hierbas
desde donde están colgados
y nos amenazan–
en el tiempo colgados como
estandartes rotos
los muertos risueños
los muertos con los dientes relucientes
nos empujan igualmente a morir
así los muertos entierran a los muertos.
Pero tú amor, perdónalos
y perdonando hunde el cuchillo
en sus gargantas de viento
arráncales un grito
como las sirenas nocturnas le arrancan gritos a la niebla
y después de arrancarles los ojos
mira por fin sin ojos.
SU UN QUADRO DI NOLDE AL MUSEO DI COPENHAGEN
L’avvampare del rosso e del giallo:
con selvaggia delizia
l’Orco divora i suoi bambini
amando sé nella carne e nel sangue.
La bellezza è forse una
più intensa voracità
al centro della vita?
Intorno a lava incandescente
gli smorti colori della cenere.
Quando l’occhio
cessa di essere abbagliato
allora scopre le viole – dopo
soltanto dopo.
Schive e affollate –
una corona alla luce.
Cancellano l’aggressività delle corolle.
Silenziosamente trasformano la sconfitta in vittoria,
nude e luminose di buio.
Ora non vedi che queste. Le sole
a muoversi: il movimento
percorre il quadro. Non più una tela cosparsa di colore,
ma una pagina che si sfoglia.
Alcune sono aperte, altre si inclinano,
altre ancora si chiudono
al vento che le investe.
Sono l’ombra dei fiori luminosi,
diverse dall’offerta della vita:
piuttosto, ciò che essa sottrae,
il velato splendore
– i loro gambi, lacci.
Vivono una straordinaria animazione:
curiose, tumultuose, si muovono
in diverse direzioni.
Fuggono quella pennellata grigia:
il turbine che sopravviene,
soggette al vento, quindi
capaci di servirsene,
di sottrarsi
alle insidie dei cervi e delle lepri.
Poi noti il loro centro giallo
un astro minuscolo nel buio:
la luce è il seme.
Solo alla fine scopri che le margherite
nella gloria apparente del loro rosso e giallo
arretrano.
Ammassate contro il vaso lanciano
grida di terrore e i petali sono braccia
levate a proteggere i volti
paonazzi di polline, teste
che saranno tagliate.
Ti accorgi che
anche le viole sono piegate e vinte,
si stanno reclinando nel vaso,
muoiono.
SOBRE UN CUADRO DE NOLDE EN EL MUSEO DE COPENHAGUE
El flamear del rojo y el amarillo:
con salvaje delicia
el Ogro devora a sus niños
amándose a sí en la carne y la sangre.
¿La belleza es quizá una
más intensa voracidad
en el centro de la vida?
Alrededor de la lava incandescente
los apagados colores de la ceniza.
Cuando el ojo
deja de estar deslumbrado
entonces descubre las violetas ‒después
solamente después.
Esquivas y apretadas‒
una corona a la luz.
Borran la agresividad de las corolas.
Silenciosamente transforman la derrota en victoria,
desnudas y luminosas de oscuridad.
Ahora no ves sino éstas. Las únicas
que se mueven: el movimiento
recorre el cuadro. No ya un lienzo salpicado de colores,
sino una página que se hojea.
Algunas están abiertas, otras se inclinan,
las demás se cierran
al viento que las asalta.
Son la sombra de flores luminosas,
distintas de la ofrenda de la vida:
más bien, lo que ella sustrae,
el resplandor velado
‒sus tallos, sus lazos.
Viven una extraordinaria animación:
curiosas, turbulentas, se mueven
en diversas direcciones.
Huyen aquella pincelada gris:
el torbellino que sobreviene,
sujetas al viento, por lo tanto
capaces de servirse de él,
de sustraerse
a las insidias de los ciervos y las liebres.
Luego notas su centro amarillo
un astro minúsculo en la oscuridad:
la luz es la semilla.
Sólo al final descubres que las margaritas
en la gloria aparente de su rojo y amarillo
retroceden.
Amontonadas contra el tiesto lanzan
gritos de terror y los pétalos son brazos
levantados para proteger los rostros
cárdenos de polen, cabezas
que serán cortadas.
Te das cuenta de que
también las violetas están dobladas y vencidas,
se están reclinando en el tiesto,
mueren.
PERSEFONE
Mi conoscevi già.
Io sono quella
che già una volta ti ha amato
quella che tu hai rifiutato dicendo
mentre mi stringevi fino a soffocarmi:
in verità io non ti amo
questo non è amore ma un’illusione
che non riguarda la mia vita
dicendo mentre la tua saliva mi addolciva il seno
mentre allattavo la tua bocca al mio seno.
Mi conoscevi già.
Io ritorno
nella luce azzurra che ti ferisce
gli occhi.
Porti gli occhiali scuri
mentre io mi tuffo fra le onde verdi
e ti tieni lontano dal mare
vestito di un abito di lino blu –
Mi conoscevi già.
E subito mi hai
riconosciuto dietro il mio
travestimento.
Ti conoscevo già.
Mi hai spogliato con dita esperte
della buccia di morbida peluria, subito segnata
dalla pressione calda del tuo polpastrello
per poi posarmi dopo un morso
accendere una sigaretta, spegnerla nel piatto
fra i residui del cibo
voltarti e allontanarti con il passo
leggero dei fantasmi.
PERSÉFONE
Me conocías ya.
Yo soy aquélla
que ya te amé una vez
la que tú rechazaste diciendo
mientras me apretabas hasta ahogarme:
en verdad, yo no te amo
esto no es amor sino una ilusión
que no afecta a mi vida
diciendo mientras tu saliva me endulzaba el seno
mientras amamantaba a tu boca en mi seno.
Me conocías ya.
Yo vuelvo
en la luz azul que te hiere
los ojos.
Llevas las gafas oscuras
mientras yo me zambullo en las olas verdes
y te quedas lejos del mar
vestido con un traje de lino azul–
Me conocías ya.
Y enseguida me has
reconocido detrás de mi
disfraz.
Te conocía ya.
Me has desnudado con dedos expertos
de la cáscara de mórbido vello, al instante marcada
por la presión cálida de tu yema
para luego dejarme tras una mordedura
encender un cigarrillo, apagarlo en el plato
entre los restos de la comida
volverte y alejarte con el paso
ligero de los fantasmas.
LO SGUARDO
Il gatto
apparve dal fondo del giardino
leccò un po’ dalla ciotola
poi sedette immobile
lo sguardo diritto fisso
le sue pupille nelle mie pupille
senza ringraziare né chiedere
solo guardare.
Ed io fui intera nelle sue pupille
interamente dentro quello sguardo
senza giudizio né attesa
quietamente fui.
LA MIRADA
El gato
apareció desde el fondo del jardín
lamió un poco en su cuenco
luego se sentó inmóvil
mirándome fijamente
sus pupilas en mis pupilas
sin agradecer ni pedir
sólo mirar.
Y yo estuve entera en sus pupilas
en aquella mirada enteramente
sin juicio ni espera
quietamente estuve.
ETERNITÀ
Tu sarai il coltello che affonda
nei bui interstizi del cielo.
Io sarò la tua notte silenciosa
affinché tu penetri
negli interstizi del silenzio e accenda
un alfabeto di faville.
Aperto dal coltello il frutto del cocco
gocciola il suo denso latte.
Una stessa luna racchiude falce e frutto,
ma guarda alla docilità del coltello.
Una stessa docilità accomuna
la lingua della mite candela che divora il buio
e la favilla che si affida.
È il cielo che si spoglia per la luna
o è nuda la luna per il cielo?
Albero della mia nave
la tua punta squassata infilza il vento.
Nell’oscurità del legno il fuoco sale
fino alla fredda luce quieta delle stelle.
Non ricomporrai il filo
delle perle che la notte ha sparso,
a quella sempiterna, a quella chiara
luce ordinando il cosmo.
L’inquieto sciame ogni notte divora
il madido frutto della luna.
Sii legna e taglialegna.
Dalla circoncisione del tronco
alto si leva lo sciame delle lettere.
Più vicino – per questo solo più ardente alfabeto
firmamento più effimero
di quello delle stelle.
Sola
eternità è la docilità che si consuma.
ETERNIDAD
Tú serás el cuchillo que ahonda
en los oscuros resquicios del cielo.
Yo seré tu noche silenciosa
para que penetres
en los resquicios del silencio y enciendas
un alfabeto de pavesas.
Abierto por el cuchillo el fruto del cocotero
gotea su densa leche.
Una misma luna encierra hoz y fruto,
pero mira a la docilidad del cuchillo.
Una misma docilidad une
la lengua de la mansa vela que devora la oscuridad
y la pavesa que se entrega.
¿Es el cielo que se desnuda para la luna
o está desnuda la luna para el cielo?
Árbol de mi nave
tu punta azotada traspasa el viento.
En la oscuridad de la madera el fuego sube
hasta la fría y quieta luz de las estrellas.
No recompondrás el hilo
de las perlas que la noche ha esparcido,
a aquella sempiterna, a aquella clara
luz ordenando el cosmos.
El inquieto enjambre cada noche devora
el sudoroso fruto de la luna.
Sé leña y leñador.
De la circuncisión del tronco
alto se alza el enjambre de las letras.
Más cercano –por eso sólo más ardiente alfabeto
firmamento más efímero
que el de las estrellas.
Sola
eternidad es la docilidad que se consume.
ROSA ALCHEMICA
Il breve spazio dell’eterno
nel cuore della rosa
specchio di fiamma al sole
fuoco d’acqua che posa
con grazia sullo stelo.
ROSA ALQUÍMICA
El breve espacio de lo eterno
en el corazón de la rosa
espejo de llama al sol
fuego de agua que descansa
con gracia sobre el tallo.
EGLI VIENE
Qualcuno mi abita
che non sono io.
Qualcuno più grande
che non conosco
a cui devo far posto.
L’ho sempre respinto finora
perché non invadesse la mia vita.
Si è seduto per anni davanti alla porta
in quieta attesa.
Viene adesso che la morte è vicina.
Egli sa dov’è il cammino
e mi lascia da parte
come la foglia secca che rotola sull’asfalto
come la pelle abbandonata dal serpente
l’involucro della larva
la coda staccata della lucertola.
Io devo farmi da parte
raccogliere gli stracci delle mie paure
le gioie inconsapevoli
e i piaceri gelosi golosi sottratti al tempo
tutte le notti trascorse
con gli occhi affissi nel delirio
di un cielo scintillante di troppe stelle.
Egli viene ora
e dietro alla sue spalle
c’è l’angelo con le ali di tempesta.
ÉL VIENE
Alguien me habita
que no soy yo.
Alguien más grande
que no conozco
a quien he de hacer sitio.
Lo he rechazado siempre hasta ahora
para que no invadiera mi vida.
Se ha sentado durante años delante de la puerta
en quieta espera.
Viene ahora que la muerte está cercana.
Él sabe dónde está el camino
y me deja a un lado
como la hoja seca que rueda por el asfalto
como la piel abandonada por la serpiente
la envoltura de la larva
la cola cortada de la lagartija.
Yo he de hacerme a un lado
recoger los trapos de mi miedo
los gozos inconscientes
y los placeres celosos golosos sustraídos al tiempo
todas las noches transcurridas
con los ojos fijos en el delirio
de un cielo centelleante de demasiadas estrellas.
Él viene ahora
y detrás de sus espaldas
está el ángel con las alas de tormenta.
Traducción de Emilio Coco
Donatella Bisutti, nacida en Milán en 1948, es poeta, ensayista y traductora de poetas, como Edmond Jabès, Bernard Noël, Louis Simpson y Jon Silkin. Ha publicado los siguientes libros de poemas: Inganno ottico (1985, Premio Internacional Eugenio Montale por el inédito, traducido al francés con el título Le leurre optique por Bernard Noël, 1988), Penetrali (1989), Violenza (1999), La nuit dans sa clôture de sang (traducido al francés por Jean-Jacques Boin y Bernard Noël, 2000), Piccolo bestiario fantastico (2002), Colui che viene (2005), Rosa alchemica (2011), Un amore con due braccia (2013) y Dal buio della terra (2015). Ha preparado una antología de poesía para los niños, L’albero delle parole (1996). Es autora del ensayo La poesia salva la vita, un verdadero best seller publicado por Mondadori, y de los libros para la infancia L’Albero delle Parole, Le parole magiche y La Poesia è un orecchio, todos en la editorial Feltrinelli. En 1997 apareció su novela Voglio avere gli occhi azzurri. Dirige la revista «Poesia e Spiritualità». La obra de Donatella Bisutti nos revela bajo la precisión de su mirada un mundo lleno de emoción. Un mundo en el que las oposiciones de contrarios, los reflejos especulares y la contraposición de vacío y sentimiento nos descubren la dimensión oculta y verdadera de las cosas.
Emilio Coco, nacido en San Marco in Lamis (Foggia, Italia, 1940), es hispanista, traductor y editor. Entre sus trabajos más recientes destacan: Antologia della poesia basca (1994), tres volúmenes de Teatro spagnolo contemporaneo (1998-2004), El fuego y las brasas. Poesía italiana contemporánea (2001), Los poetas vengan a los niños (2002), Poeti spagnoli contemporanei (2008), Jardines secretos (2008), La parola antica. Nove poeti indigeni messicani (2010), Dalla parola antica alla parola nuova. Ventidue poeti messicani d’oggi (2012), Trentaquattro poeti catalani per il XXI secolo (2014), Con il fuoco del sangue (Trentadue poeti colombiani) (2015), Vuela alta palabra (tres tomos, 2015), Il fiore della poesia latinoamericana (tres tomos, 2016), Una goccia di luce inafferrabile. Antologia della poesia cubana (en colaboración con Waldo Leyva, 2017), La poesía italiana del siglo XX (2017), Le grandi voci della poesia ecuatoriana (2018), Antologia della poesia honduregna (2019), Il paese degli specchi. Antologia della poesia boliviana d’oggi (2019) y Antología de la poesía costaricana (2020) además de algunas muestras de poesía argentina, nicaragüense y de la república dominicana. Ha traducido, entre otras, la obra de Jaime Siles, Luis García Montero, María Victoria Atencia, Juana Castro, Luis Alberto de Cuenca, Juan Manuel Roca, Marco Antonio Campos, Hugo Gutiérrez Vega, Ramón López Velarde, Víctor Rodríguez Núñez, Leopoldo Castilla, Jaime Sabines, Alí Chumacero y Santa Teresa de Ávila. Como poeta ha publicado: Profanazioni (1990), Le parole di sempre (1994), La memoria del vuelo (2002), Fingere la vita (2004), Contra desilusiones y tormentas (2007), Il tardo amore (2008, traducido al español, al gallego y al portugués, Premio Caput Gauri, 2008), Il dono della notte (2009, Premio Alessandro Ricci-Città di Garessio, Premio Città di Adelfia, Premio Metauro, Premio della Giuria «Alda Merini»), El don de la noche y otros poemas (2011), Ascoltami Signore (2012, traducido al español con el título Escúchame Señor), Las sílabas sonoras (2013), Mi chiamo Emilio Coco (2014), Es amor (2014), Las palabras que me escriben (2015), Vuelva pronto el verano (2017), Sé que ya no será como era antes (2020), Del dolor y la alegría (2020) y algunas plaquettes. Está traducido a una docena de lenguas. En 2003 el rey de España Juan Carlos I le otorgó la encomienda con placa de la orden civil de Alfonso X el Sabio. En 2014 fue «Poeta Homenajeado» en el Festival «Letras en la Mar» de Puerto Vallarta. En 2015 recibió el premio “Catullo” por su labor de difusión de la poesía italiana al extranjero. En 2016 le fue otorgado el premio “Ramón López Velarde”.