PORQUE NADA ES ETERNO
Esta mesa donde los platos vacíos y las migas
de pan abundan
es la arbitrariedad de permanecer en silencio
frente a una silla
sin importar siquiera que esté vacía o no
Nada concierne a la variable que impera
donde nada se dice
sólo el mudo abandono de las cosas que no
viven con nosotros
Fuimos una construcción atiborrada de gozos
y estruendos
Nadie reconocería ninguno de nuestros
anhelos
ahora que nos adentramos en una habitación
vacía
DISTINGUIR COMO COSA FÁCIL
Entonces vi colapsar nuestros altares
sin recordar cómo fueron nuestros ayeres
en los que levantamos complicadas fábulas
que hoy duermen a mis pies
sedientas, inmóviles y por demás lejanas
COMO UNA VOZ CONOCIDA
Este cuarto que contiene mi muerte
cenizas que respiro y tomo
como la sangre que me acosa sobre toda hoja
Este lugar al que siempre se regresa
Esta muerte en mí
hecha del poema como quien se abriga a sí
mismo
UN LUGAR EXACTO
Por todo el lugar se encuentran artefactos de
papel
una brújula, un avión, un barco
Quemaremos los instrumentos frágiles
para reemplazarlos por figuras de barro
Todas de mis nombres
De mis sobras todas
QUIZÁ UN JARDÍN
De nuevo, la acción que nos alienta
crece como un árbol que deja caer su fruto
en las manos que curiosean el lenguaje
LUGAR DE NADIE
Alguien se pregunta por el paradero de las
cosas
en esta casa ancha y escasa de secretos
¿Dónde están las imaginaciones a tiempo?
Todo transcurre como algo que no tiene caso
y que de pronto surgirá como ayer germinó
su propio ayer
Afán
Seguimos buscando en esta inmensidad de
casa sola
en la inmensidad que nadie honra ni glorifica
nunca
SIN REGRESAR
Entonces
todos decidimos tapar con gruesas mantas
nuestros espejos
viviendo entre el polvo debajo de nuestro
polvo
llegamos a parecernos a viviendas que fueron
saqueadas
una y otra vez sin poder cerrarse de nuevo
AYER REGRESÓ
Desconozco este lugar que fue
sus muchas calles y múltiples voces que lo
habitan
Hoy mi propia voz es un misterio, algo
lejano
un piso sin nombre que transpira y calla
Todo es un lugar ajeno que desconozco
Si me llaman no acudiré
si me buscan
no me hallaran
Porque caigo en la fuerte costumbre
de las horas atrasadas y las calles solitarias
y de nuevo afirmo, de nuevo
si alguien aún me recuerda
no me reconoceré en ninguna de sus
invocaciones
Regreso del paraíso que he escudriñado hace
Siglos
Julia Melissa Rivas Hernández (México). Maestra del taller écfrasis y minificción de la escuela de escritores del ISC. Editora de literatura mexicana en Abisinia Review. Licenciada en Artes Plásticas y en Literatura Hispanoamericana. Ha sido beneficiaria el Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Sonora (FECAS) 2011-2012 por el poemario Mercadeo. Ganadora de VII Juegos Florales Nacionales Toluca 2019 “Horacio Zúñiga” y de los Juegos Florales Lagos de Moreno 2018, categoría cuento; así como el segundo lugar en el Premio Nacional de Cuento de Zaachila, Oaxaca (2017). Libros: El manual inédito de la moda (en imprenta) y Habitaciones (2011).