BACK HOME
A veces
hay caballos volando
por el diapasón imaginario de mi cabeza
furiosos y libres caballos.
Pero otras veces
me pierdo
de vuelta a casa
de vuelta a casa,
en el bosque
me pierdo.
BLUE NOTE
A Jorge Arturo
…Berangere, es un nombre largo,
demasiado largo para una niñita…
Las pequeñas
graves voces del sax
revientan la noche,
el orín en el callejón y los vapores,
escalan el dorado metal
de un viejo selmer.
La ciudad le duele al intérprete,
importa poco si es
Brooklyn o París
de cualquier modo el Sena
arrastra en sus jadeante cause
el dolor de un mundo que intenta reinventarse
una y otra vez.
Hay una vieja canción olvidada,
que habla del otoño
una vieja tonada
perdida entre los pasadores coronados de nácar
una vieja canción rebotando, ausente
sobre la muscular memoria de un encorvado Dale Turner
una vieja canción para soñadores de manos vacías
una vieja canción de terciopelo suave
y azul
como la mirada de Berangere.
HOW TO KILL A BIRD
La noche es como pájaros,
asustadas semifusas en el azul de las tabernas
pentagramas de hombre triste.
–NOSTALGIA–
tozudamente almacenada en la
–tenebrosa /sombra/ prima /queda–
Chillidos
que arremeten
sobre la memoria
con sus furiosos aguijones
de marfiles.
Un once,
vaho pitagórico,
que no se cruza,
porque si lo haces,
hiere.
Encrucijadas análogas
de los wester de la infancia,
pequeños remolinos de hierba,
violentando
los minúsculos pactos
hechos desde el amor.
EL PERRO QUE AÚLLA
Cuando pase la media noche
empezaré a búscate
–mi niña negra–
En el verde profundo empezaré a buscarte
a buscarte mientras una brisa,
aún fría y húmeda
golpea las blancas fibras en los arbustos
y la luna
con lentitud atraca sobre las aguas del delta.
Cuando pase la media noche
conversaré con el río
sobre mi niña enterrada-viva
por el azul de su corriente.
Cuando pase la media noche
iré a la encrucijada
y hablaré con los muertos
cuando pase la media noche.
HEBRAS
A BB King
Las hojas caen
en el jardín, Mary
y es temprano aún par ir a jugar con la yerba
pero nena,
las hojas caen,
viajan por la demacrada arquitectura
de esta ciudad.
Mary
regálame un parpadeo
mientras tomo café.
Ayer vino el cartero,
dejó su chaqueta roja en la baranda,
trajo noticias del viejo mundo,
donde fuimos felices bailando entre los sauces llorones de antaño.
Mary, prende un porro en la estufa
–aún humante–
Y escucha el susurro del viento,
escucha al viejo heraldo, hablar
de nuestra casa en la montaña
y de las hojas
que nunca dejan de caer sobre nuestro cobertizo.
Vamos al jardín Mary,
Vamos al jardín
y sintamos las hojas sobre nuestra piel magra y divina.
Vamos al jardín a revolcarnos en el verde
Y soñemos, una vez más con nuestros hijos,
–se ven tan pequeños e indefensos en las fotografías–
Esta ciudad está llena de ojos muertos Mary.
Tras sus puertas de metal y de granito
Ya nadie sonríe.
Pero las hojas caen nena
Y la mañana empieza regalándonos un blues
azul y vegetal.
Como tus ojos Mary
Como tus ojos de yerba seca.
BAJO LA LLUVIA FRÍA
The night my father died in the cold cold rain (in the cold cold rain)
La noche que murió mi padre bajo la lluvia fría (bajo la lluvia fría)
T.W.
Enciende una luz muy blanca
sobre el negro escenario de tus días
y pon con urgencia algo de polvo en tu nariz,
–pon un gato muerto en las vías del tren–
e imagina por un momento
el irrisorio bombín de Tom Waits.
Luego,
–respira sumiso– lo que el aire de la noche te cuente.
El día que mi padre murió,
Recodé a Jack Kerouac.
Llovía con timidez,
y caían del cielo
finas y frías
hebras de gato negro.
Desde entonces
tan solo sigo el camino,
tan solo lo sigo,
sin importar
en qué lado de la carretera
pongo mis pies.
VEN A CHICAGO
Vamos a Chicago
vamos a Chicago
donde los bares
del viejo distrito Sur
son los ojos de la noche,
vamos ahora
que los tanques rojos
ya no ruedan sobre Checoslovaquia
y los muchachos ya no queman sus boletas
camino a Canadá-fronter.
Vamos, vamos, vamos,
recordemos juntos
como se ahogaban las tristes melodía
entre las Thompson y el humo de las tabernas.
Acompáñame a la ruda-eléctrica ciudad
y susúrrame algo sobre de Etta James
o Magic Slim
y su guitarra,
háblame duro de la 888 y prohibición,
del oprobió y el dolor de aquellos años.
Vamos a chicago
Vamos a chicago
vamos.
Textos del poemario inédito Blue
Melvyn Aguilar (Costa Rica). Cursó estudios de sociología en la Universidad de Costa Rica. Es cofundador del Colectivo Octubre Alfil 4, del Colectivo Voz Urbana y del Taller Anti-TallerAnti. Dirigió la revista de literatura costarricense La Mandrágula. Ha publicado: Territorios habituales (2006), Xarxa D’ Aranya (2012) y MayDay (2015). Es el editor de la revista de poesía “El pez Soluble”. Publica desde el 2010 en e l Blog “La ratonera”. Miembro fundador de la Editorial FALENA en El Salvador y cofundador del espacio para la conceptualización en el arte I: TALLER. Tiene inéditos los poemarios: Modus Operandi (poesía) 2015, Malversación del Paraíso (poesía) 2011, Detrás del conejo del espejo (Poesía), 1996, Kaldunia (Poesía), 1993.