غَفوة
حينَ تدخلينَ البيتَ
لا تُحدثِي ضجَّةً بكعبِكِ العالي
ثمَّةَ فراشاتٌ نائمةٌ في الرُّكنِ
في انتظارِ شموعِنا الليلة
ثمَّةَ أصواتُنا البارحةْ
تغفو فوقَ شرشفِ سريرِنا الأزرقْ.
SOMNOLENCIA
Cuando entres en casa
no hagas ruido con tus tacones altos.
Hay algunas mariposas dormidas en el rincón
esperando nuestras velas esta noche.
También nuestras voces de anoche
dormitan encima de nuestras sábanas azules.
عَذراء
تهمسُ العذراءُ لأبيها
حين ترى قطوفاً دانيةً من شجرةِ العنبْ:
- انظر..
لما امتلأتْ عروقُهَا بالرَّحيقِ
انفلقتْ حبَّاتُها
عن عصيرِها المكْتَنَزْ!
DONCELLA
Susurra la muchacha al oído de su padre
al ver los racimos de uva tan cerca:
Mira,
después de que sus tallos se llenaron de néctar
las uvas se abrieron revelando el jugo abundante.
أُنوثة
صغيرةٌ هي الزَّهرةْ
والفراشتانِ القادمتانِ من بعيدٍ
تتسابقانِ للفوزِ برحيقها
تنظرُ الزَّهرةُ الصَّغيرةُ بعينِ أنوثتِها
وتنتقي
فتميلُ إلى حيثُ تهرولُ فراشةً ثالثةً
أبهى وأجملْ.
FEMINIDAD
Tan pequeña es la rosa
y las dos mariposas que vienen de lejos
compiten para ganar su néctar.
La rosa mira con sus ojos de feminidad
y elige,
se inclina hacia el lado por donde viene apresurada
otra mariposa más bella y más brillante.
إِنْصَات
أنصتي بقلبِكِ
ثمَّة أنينُ زهرة يمرُّ تحتَ نافذتِنا
نبتتْ في الظِّلِ
دون أن يراها أحدْ.
ESCUCHAR
Escucha con tu corazón
el gemido de una rosa
pasando por debajo de nuestra ventana.
Creció en la sombra
sin que nadie la mirara.
خَيبة
غرَّرتْ فطنتي بي؛
قطرةُ الملحِ
التي حسبتْها شفتاي عرقاً فوقَ خدِّكِ
لم تكن إلا
دمعةْ!
FRACASO
Mi inteligencia me ha fallado.
La gota de sal,
que mis labios pensaron que era sudor en tu mejilla,
no era más que una lágrima.
أوبة
لا تفُكِّي شعرَكِ الآن
كي لا تعودُ الطُّيورُ سريعاً
إلى أعشاشِها.
REGRESO
No sueltes tu cabello ahora,
para que los pájaros
no regresen pronto
a sus nidos.
طَمع
حين دخلتِ
وأنا منشغلٌ في الكتابةِ
كادَ سريرُنا أن يصرخَ بي:
انظرْ.. انظر!
لكنَّهُ - كالعادةِ -
طمعَ في طلَّتكِ
كاملةً!
CODICIA
Cuando entraste
estaba yo ocupado escribiendo.
Nuestra cama estaba a punto de gritarme:
“¡mira, mira!”
Pero, igual que siempre,
esperaba tu presencia entera.
إِغْواء
مَنْ قالَ إنَّ الحريرَ يحتاجُ إلى دانتيللا مخرَّمةٍ ليُغْوِينا النَّظر؟!
SEDUCCIÓN
¡Quién dijo que la seda necesitaba un encaje para que la mirada nos sedujera!
عَرق
ترفعينَ يدَكِ في ارتباكِنا
وتمسِّدينَ ظهرَ عنقِكِ السَّاخنِ
أنظرُ في يدي
فأجدُ حبَّاتَ العرقِ الصَّغيرةِ كلَّها
فوق أصابعِي.
SUDOR
Levantas tu mano en nuestro enredo
y acaricias tu nuca caliente.
Miro mi mano
y encuentro todas las gotitas de sudor
encima de mis dedos.
Traducción del árabe de Ahmad Yamani y revisión de Agustín Porras.
Emad Fouad nació en la provincia de Menufía, Egipto, en 1974 y creció en El Cairo. Es poeta, traductor y periodista que colabora con diversos periódicos y revistas en el mundo árabe. Ha publicado seis poemarios en árabe, entre ellos: Seda (2007), Diez formas para escarmentar a un cadáver (2010), y Ese es el lenguaje de las presas afortunadas (2019). Asimismo, ha publicado una colección de sus poemas en francés, una novela y varias antologías sobre el poema en prosa egipcio. Algunos de sus poemas fueron traducidos a varias lenguas y ha participado en importantes festivales internacionles de poesía. Reside en Bélgica desde 2004, en la ciudad de Amberes.
Ahmad Yamani (El Cairo, 1970), es poeta egipcio residente en España desde 2001. Doctor en Filología Árabe por de la Universidad Complutense de Madrid, de la cual ha sido Profesor Asociado, e informador de Radio Nacional de España, emisión en árabe. Ha publicado cinco poemarios en árabe y una selección de su poesía traducida al castellano Refugio de huesos (2015). Ha recibido varios premios literarios. Algunos de sus poemas fueron traducidos a varias lenguas y ha participado en importantes festivales internacionales de poesía. Ha traducido al árabe varios autores tanto españoles como latinoamericanos.