MONÓLOGO CON PESSOA
Estar aquí no es más que una suma
de sueños y costumbres.
Vivir sucede siempre
al margen de vivir.
A veces me llamas y me salvas.
Y cuando me nombras
soy lo que imaginas.
Entonces todo vuelve a su lugar,
cada letra a su palabra.
Así es como supe lo cierto,
dudar porque todo es incierto.
Que cada cosa es otra
en un raro más adentro,
desdoblado en los azahares
de infinitas consecuencias.
Somos engañados,
el tiempo se nos parece demasiado
y está hecho de nuestras imposibilidades.
El presente dice que es ayer,
el hoy que es el mañana.
Solo nos queda esta línea terca
de tiempo continuo,
que se irá con nosotros para siempre.
MARAVILLOSA RECONSTRUCCIÓN DE UNA TARDE
Así pesen los años
la tarde en que has sido feliz
será para siempre.
La infancia crece de golpe
desde el patio de la escuela.
Para poder construirla
tenemos que volver,
rasgar la porcelana de la tarde
con silbidos de golondrinas
y mariposas de colores.
Alguien debe poner
su oído sobre la tierra,
hablaremos en voz baja
para no despertar a los muertos.
Del otro lado está la casa
abandonada repleta
de espíritus
y alguno podría reconocernos.
Dentro de la gran película
vendrá también José
con su linterna mágica
y abrirá el río a la luz
del cine Mendoza
y una barcaza cruzará
la tarde para que pase el sol
y convierta en púrpura las aguas,
mientras el atardecer
lia y deslia el río del tiempo.
Así venimos y …
DESPUÉS DE UNA LECTURA DE EMANUEL LEVINAS
Lo real es lo queda de un hombre
después del sueño del conocimiento.
Reunir esos fragmentos
es leer las manos de dios
en su día cero.
Vuelto el rostro
en un curioso más adentro
donde la pregunta es el otro irreducible.
Pararse de nuevo
ante un huevo o una semilla,
antes que sean otra vez el pájaro y el árbol.
Cada día tiene algo del último
donde toda construcción será ceniza.
Menos
esta visión esperanzada,
de la luz del tiempo
entre las hojas.
Que deja caer las frutas ya maduras.
Y que al abrirse la noche
con el alba.
Nos hace interrogar lo que ha quedado.
SER OTRO
Mi alma,
que tanto ha luchado
por volver a ser
tu alma,
ya no pertenece
ni siquiera al recuerdo.
Allí donde las piedras
del molino
detuvieron su marcha
fui atravesado
por un rayo de luz.
Y esa mañana
desperté nuevo
en su cantera.
Mi antigua vida
fue una piedra
triste y luminosa,
Recién tallado
ahora y sin memoria
vuelvo a la vida,
Como lo hace
un dios desconocido.
¡Ay, esta vocación secreta
que tengo por ser otro!
Héctor Berenguer nació en Rosario, Argentina, en 1948. Es poeta, ensayista y se ha desempeñado también como gestor cultural. Como poeta y ensayista, ha participado de múltiples festivales de poesía, tanto nacionales como internacionales, ha recibido, también, el Premio de Honor de la Fundación Argentina para la Poesía en 2020. Como gestor cultural, ha coordinado el Ciclo de Poesías en el Teatro El Círculo de Rosario durante 22 años (1998 – 2020). Su obra ha sido publicada en revistas especializadas y antologías, tanto locales, como de distintas partes del mundo y ha sido traducida a diferentes idiomas. Su volumen completo será editado tanto en Nueva York como en Argentina en el corriente año, 2023.