23 Nov 2024

25. POESÍA CHILENA: RAÚL ZURITA

-26 Jul 2020
Poesía

 

TE PALPO, TE TOCO Y LAS YEMAS DE MIS DEDOS

 

Te palpo, te toco, y las yemas de mis dedos

buscan las tuyas porque si yo te amo y tú

me amas, tal vez no todo esté perdido. Las

montañas duermen abajo y quizás las

margaritas enciendan el campo de flores

blancas. Un campo donde Los Andes y el

Pacífico abrazados en el fondo de la tierra

muerta despierten y sean como un horizonte

de flores nuestros ojos ciegos emergiendo

en la nueva primavera, ¿Será? ¿Será así? las

margaritas continúan doblándose sobre el mar

difunto, sobre las grandes cumbres difuntas y

en la oscuridad, como dos envanecidas pieles

que se buscan, mis dedos palpan a tientas los

tuyos porque si yo te toco y tú me tocas tal

vez no todo esté perdido y, todavía, podamos

adivinar algo del amor. De todos los amores

muertos que fuimos y de un campo de flores

que crecerá cuando nuestras mortajas blancas,

cuando nuestras mortajas de nieve de todas

las montañas hundidas nos besen boca abajo y

nos vuelvan para arriba las erizadas pestañas.

  

 

LAS CIUDADES DE AGUA

(fragmento)

A PW

 

Un hombre que agoniza te ha soñado, un hombre

que agoniza te ha seguido. Uno que quiso morir

contigo cuando tú quisiste morir.

Allí está mi cuerpo estrellado contra los arrecifes

cuando ahogándome te vi emerger y eternamente

cerca y eternamente lejos eras tú la inalcanzable

Todo en ti es doloroso.

Te saludo entonces y saludo a lo eterno que vive

en la derrota, a lo irremediablemente destruido,

al infinito que se levanta desde los naufragios,

porque si agua fueron nuestras vidas, piedras

fueron las desgracias.

No soy yo, son mis patrias las que te hablan: el

sonido de océano que describo, las estrellas de

la recortada noche.

Iluminada de la noche tu cara sube cubriendo

el amanecer. Abres los párpados, entre ellos

millones de hombres dejan el sueño, toman sus

autobuses, salen,

las ciudades de agua en tus ojos

 

 

Raúl Zurita nació en Santiago de Chile en 1951. Es autor de una poesía portadora de un desgarrado grito interior, que da cuenta del malestar del sujeto y su desajuste con la historia. Estudió Ingeniería Civil en la Universidad Federico Santa María de Valparaíso, ciudad en la que conoció a Juan Luis Martínez, junto a quien desarrolló posteriormente una intensa actividad creativa. Tomó parte en el Colectivo Acciones de Arte (CADA), también integrado por Diamela Eltit, Lotty Rossenfeld, Fernando Balcells y Juan Castillo. El objetivo de la agrupación era intervenir el espacio urbano con imágenes que cuestionaran la vida en el Chile dictatorial. Las acciones de protesta emprendidas por Zurita en contra del orden imperante provocaron una gran polémica: entre otras, el autor chileno llegó a quemarse el rostro con ácido. En línea con su voluntad por transgredir el signo lingüístico, en 1982 escribió sobre el cielo de Nueva York el poema La vida nueva. Sus dos primeros libros fueron Purgatorio y Anteparaíso (1982), títulos que presentan, en opinión del académico Rodrigo Cánovas, “una liberación de los códigos represivos que a través de la historia han tratado de subyugar al lenguaje”. Tras la publicación del ensayo Literatura, lenguaje y sociedad, en el que aborda su proyecto estético personal, la inmersión en la angustia humana quedó plasmada en Canto a su amor desaparecido (1986) y El amor de Chile (1987). En el año 2000, recibió el Premio Nacional de Literatura, tras lo cual inició la escritura de Zurita (2011), un libro monumental de casi 800 páginas, en las que dibuja las horas previas al 11 de septiembre de 1973, fecha del estallido del golpe de estado de Augusto Pinochet



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