OTRO MUNDO POSIBLE
(fragmento)
MINA Y LOS PÁJAROS DEL CIELO
Felina enredada
en el arbusto
lamiéndose las heridas
recuerda
el pecho del gorrión.
Felina en lo alto de la barda,
lamiéndose el culo
a la luz de la luna,
recuerda
el pecho del gorrión
el centro
del gorrión. Ronronea.
UN SINIESTRO ACONTECE
en el canario del pecho:
lluvia de respiraciones
el granizo del presentimiento.
La luz germina
dentro del pecho del canario:
ráfagas y truenos
el canto del relámpago
deshecho.
Creas tormenta
desde el pecho
del canario del pecho
entre los dientes de otro animal.
¿HACIA DÓNDE CORRER
si son ojos los que persiguen?
¿Dónde esconderse
sin son manos
de palabras
las que tocan.
Dónde debe refugiarse el miedo
a la oscura quietud
de la noche?
¿Hacia dónde los pasos
si su destino es llegar
a casa?
¿Cuál es tu casa sino tu cuerpo?
Tu casa como mi cuerpo
también es la ciudad
un bosque en llamas
el mundo entero.
DI ADIÓS AL TREN
cada que escuches el rechinido de las ruedas sobre el riel.
Di adiós al sol cuando escuches el primer canto de los cuervos.
Adiós al viento al cerrar la puerta de la casa.
Adiós a la calle cuando se esconde el sol.
Di adiós, casa de los abuelos
al alejarte hacia la primavera eterna primavera.
Di adiós, pichón.
HAY SANGRE PORQUE EXISTE EL CORAZÓN,
el corazón bombea porque hay pensamientos.
Pero también hay piernas y caminos
y calles por donde anda tu mirada.
Hay deseo y plumas rojas
creciendo en la espalda
¿por qué todavía dudas de lo que estás formada?
BRUJA
Su nahual es un animal con alas,
un búho o una mariposa,
una paloma en la cornisa del techo,
un halcón
en la zona del silencio,
una equilibrista
en la rama más frágil
de un árbol altísimo.
La mujer
vuela.
ELLA CANTA CON SUS MANOS
#thatkidwhosigns
balancea la mano derecha sobre el flexionado brazo izquierdo
y comienza una música invisible.
Entona con dedos
palabras inquietas, canta
con sus ojos, su pecho: dice diablo
con las palmas abiertas sobre la cabeza,
dice niño como si sacara un conejo del sombrero,
de sus índices saltan flores directo a la nariz
y de su boca a su puño abierto toda la calidez del cielo;
tararea con el pulgar una niña sobre su mejilla,
su palma silba una vela encendida,
enfoca con su diestra el ojo parlante para vocalizar la luna.
El tiempo transcurre en su muñeca
donde se acelera el pulso
cada que entona con sus gestos
el lenguaje de quien no vocifera.
X
Nadie se marchita
y vuelve a ser lo mismo.
Renueva, altera el paisaje
suelta semillas,
inventa la lluvia,
agua melancólica, pasa.
Renace
el arbusto que recuerda
un espejo en el jardín del mundo
refleja tus ojos,
mi boca, lengua nuestra
sangre resplandece en bulbos,
revive
quién eres:
Yolotl:
Tule espejo.
Miriam Ponce Ruiz (Ciudad de México, 1982). Estudió en la Escuela de escritores Ricardo Garibay de Cuernavaca, Morelos. Publicó Desiertomar con la editorial independiente Lengua de Diablo. Ganó, con el libro Otro mundo posible, la Convocatoria a Obra Inédita del Fondo Editorial de Morelos. Es tallerista, mediadora de lectura e integrante de Hola, Poesía.