MORENA BAJO EL SOL
tan fácil morir en el espacio blanco
los pies llenos de grietas
buscan la sombra de un árbol ardiente
cuando vence el cansancio
y vuelve el sabor de tu cuerpo
se empieza a llorar
de índigo
LOS TRIBUNOS SON BLANCOS
me voy pronunciando tu nombre al revés
para deshacer el conjuro que me ajoró
al vientre de un insecto sin élitros
y coloco la carta del ahogado
en la cruz de los tiempos
sobre el paño negro de las adivinaciones
allí en el centro
donde pregunto quién soy
mientras el eremita mira el desierto
y un grano de arena
se posa justo en el centro de mi lengua
a la derecha de la cruz, invertida
la carta del perro
así veo que a otras proteges
resguardas sus nombres
mi historia toda recogida en el ahorcado
y me llaman los bufones
a ocupar el antiguo lugar de mi jerarquía
se están borrando las líneas de mi mano
ellos por primera vez callan
y te miran
yo, salida por la puerta equivocada del laberinto
me siento ante un camino sin encrucijadas
dobles son los pasos de la maldad
de la voz de mis hermanas
ESCANCIADA. EN LAS MANOS van las cuentas de los rezos. no te tengo en mis certezas ni en las dudas. el roce de tu mano me palpita. en sonrojos, su destreza. no me ha quedado otra. encerrarme en silencio muy ajeno. trazar con tiza dura, que dibuja las siluetas y horada los dedos de los sastres. una línea divisoria, el mojón de la patria que construyo a fragmentos cuando vuelvo a mis razones.
de regresaba a las injurias
EN LAS DELICIAS DE LAS MANOS QUE SE JUNTAN
exhalan las súplicas piadosas
entre las transparencias del clarear de este día
aquello que nunca te he dicho
mi frágil condición
de hembra
este cuerpo que se adentra inquietando el tiempo
no la misma ni en el recurrente gesto de las manos ni en la melancolía del esternón para que allí seduzcas la dureza que soy y este llanto que se agolpa en las pulpas de los dedos
olisqueada y sin hollejos y no en silencios sino en el clamor
bajo tu mano sofocado este sonido de lluvia
de los inciensos
la luz se me escapa que se pierde hacia tu carne
hasta la estela del alma
de deléterea
FUI OLIENDO LA DEBILIDAD la razón que te guiaba llevaba el signo de lo fuliginoso mi rostro era un tizne de dolor cuando abría los consuelos encerraba los venenos sólo escuchaba el retorno de la deletérea luz que preñaba de latidos las entrañas porque cuando se tocan las pieles y se abrazan los cuerpos una diosa de rostro tiznado deja que se abrumen los árboles y los avellanos para que los designios se cumplan
la lobreguez de este amor
de deléterea
EL DIENTE ROTO
esperé el insulto
mientras rozaba con la lengua la verdad
en un trozo tallado y desnudo
sabía que era el olvido
en mi boca
mi lengua herida por la astilla
mis olvidos cuidadosos para seguir respirando
de todo arrebatada
no podía fingirme en grandes pensamientos
de las conductas discretas
MALOS TRATOS
siempre hay que buscar la mejor ganancia
sin impedir medrar al otro
como la flor que acaba de abrir
negocia con la vida
pues efímero el instante
la memoria larga
de los malos tratos que hagas
tus venas engrosadas por el tiempo serán testimonio
como periódicos viejos amontono los maltratos
por si acaso he leído mal
a veces tomo alguno y lo releo
pero todo sigue igual
he hecho muchos malos tratos
muchos maltratos me acompañan
esto es así y de corrido
volverán de golpe
cuando el vino se disuelva en tu garganta
de las conductas discretas
NUNCA ES IGUAL
cuando me abrazas con desnudez y voy
escuchando tu respiración
su canto
el ritmo de la sangre
la exhalación la luz
en la insistencia
tú que conoces los latidos de mi cuello
cuentas el temblor de mi pecho el jadeo elusivo
las notas más firmes del perfume embriagan la memoria
Inédito
María Antonieta Flores. (Caracas, 1960). Es poeta, ensayista, Magister en Literatura Latinoamericana. Ha publicado desde 1991, 14 libros de poesía. Su obra está incluida en más de veinte antologías nacionales e internacionales, ha sido reconocida por cuatro premios y dos menciones de carácter nacional y ha sido traducida a seis idiomas. En 2016, seleccionada entre 2112 participantes de 63 países, recibió el Honor prizes (for complete work) Naji Naaman’s Literary Prizes (Líbano). Es la editora y fundadora de la revista de poesía digital el cautivo http://elcautivo.net/, creada en 2004. Su publicación más reciente es las conductas discretas (Bogotá, 2020).